Los edulcorantes son productos ya sea naturales o artificiales que cumplen la función de sustituir a la sacarosa que contiene el azúcar. Su valor nutricional es inferior al de todos los productos azucarados y le dan a nuestro paladar una sensación de dulzor superior al que estos producen.
Al tener bajo poder calórico, no representan supuestamente una amenaza para el sobrepeso o consumo excesivo de azúcar.
Consumir edulcorantes evita el consumo excesivo de azúcar procesada, la cual, en teoría, no necesitamos, pues muchos alimentos ya la contienen, como es el caso de las frutas.
El hecho de que no contengan casi calorías no significa que podemos consumirlo indiscriminadamente, según La Ingesta Diaria Admisible (IDA), el consumo de sacarina no debe superar los 2,5 mg por kilo de peso al día, lo cual se traduce en 175 mg para una persona adulta de 70 Kg.
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