¿Es la cavitación la solución al sobrepeso?

No, la cavitación no es solución al sobrepeso, es una ayuda para eliminar grasas localizadas en procesos de adelgazamiento mediante dieta y ejercicio físico. Cuando hay gran sobrepeso, no solo hay acúmulos de grasa localizada, sino que el tejido adiposo aumenta a todos los niveles, incluso intraabdominal.

Ejercicio físico para que la cavitación sea más efectiva

Con la cavitación, se pretende reducir celulitis y grasa localizada desde la primera sesión y de forma  no quirúrgica.
El termino cavitación hace referencia al fenómeno derivado de la aplicación de ultrasonidos a baja frecuencia. El objetivo de emplear cavitación es incidir sobre el tejido graso, destruyendo los adipocitos y logrando que éstos liberen el contenido graso acumulado. Esta tecnología logra esta acción lipolítica de manera segura y no invasiva.
Después de someterse a un tratamiento de cavitación, alrededor de un 10% a un 20% de los desechos lipídicos son llevados al hígado que vuelve a metabolizarlos y los convierte en adipocitos.
Por esta razón, se aconseja hacer ejercicio, para que el ATP producido por la catabolización lipídica sea utilizada por el músculo en forma de energía y no para la biosíntesis de los triglicéridos.

¿Cuánto cuesta una sesión de cavitación estética o ultrasónica?

Los precios por una sesión de cavitación suelen rondar entre 100 y 110€, incluso más baratas si adquirimos un bono.

El número de sesiones necesarias va a depender de la cantidad de grasa que necesitemos eliminar, el mínimo de sesiones para obtener los mejores resultados se situá en torno a 10.

¿Es dolorosa la cavitación ultrasónica?

La cavitación ultrasónica es una técnica no quirúrgica que implica el uso de ondas ultrasónicas que te permitirán reducir la adiposidad localizada, arrancando las conexiones de las células de grasa que que se liberarán a través del sistema urinario.

Es indolora. Es posible que aparezca algo de enrojecimiento de vez en cuando, pero no causa dolor. El calor generado por la luz es perfectamente tolerable.

Cómo quitar la grasa localizada

La llamada Grasa localizada es aquella que se acumula en algunas partes de nuestro cuerpo y de difícil eliminación con dietas o ejercicio. Desde hace ya muchos años se ha recurrido a la medicina estética para solucionar este problema que afecta tanto a hombres como a mujeres.
La liposucción es una forma eficaz de eliminar estos depósitos grasos, además se previene la nueva formación de estos cúmulos de grasa, ya que las células adiposas no se reproducen en la edad adulta, solo pueden hipertrofiarse. La fibrosis producida al eliminar la grasa dificulta el desplazamiento y asentamiento de otros adipocitos.
Aunque la liposucción es la opción ideal para eliminar grasa de forma localizada, no es un tratamiento para la obesidad.

La cavitación o ultracavitación, tambien puede ser una forma adecuada de eliminar grasa localizada. La Cavitación utiliza ultrasonidos para romper los adipocitos, liberandose de esta forma la grasa.

Aparatos de cavitación y radiofrecuencia para adelgazar

Mediante el sistema de cavitación se emiten ondas de ultrasonido de gran velocidad que destruyen las células adiposas (adipocitos), liberando así la grasa contenida en ellas. La destrucción de los adipocitos provoca la transformación de la grasa en sustancia liquida que será eliminada a través de masajes o drenaje linfático.

Este sistema se combina con la radiofrecuencia que trabaja a nivel de la piel. Esto es fundamental porque los aparatos de cavitación cada vez poseen mayor potencia, se puede reducir en una sesión hasta 2 centímetros, pero la piel no siempre tiene la capacidad suficiente de retracción.

El calentamiento que produce la radiofrecuencia, entonces estimula la producción de colágeno y elastina, lo que tensa y estira la piel.

Normalmente los tratamientos duran 35 minutos, que se reparten en un sola área de trabajo: abdomen, glúteos, zona externa o interna de la pierna. En cada sesión, hay una reducción de volumen de unos 2cm. Las sesiones se deben realizar cada 72 horas, tiempo necesario para que el organismo elimine la grasa. Se recomienda realizar entre 6 y 12 sesiones, dependiendo de la zona tratada y del estado del paciente. El mínimo de sesiones recomendadas son de 6 a 10.  

No necesita anestesia y está dotado con la máxima seguridad para el paciente.