Bronceado dorado gracias a los Carotenos

Los Carotenos estimulan la producción de melanina en las células de la piel llamadas melanocitos, éstos protegen la piel y le dan el color dorado. Cuantos más carotenos, antioxidantes y antirradicales libres haya en la sangre, más protegido estará nuestro cuerpo contra los UV y mejor se bronceará.

Los Carotenos son una sustancia que está presente en varios alimentos y está demostrado que favorece el bronceado, por lo que es muy recomendable que se tomen antes y después de ponerte al sol.

Existen distintos tipos de Carotenos y son los responsables del color de multitud de vegetales.
Podemos encontrarlos en las zanahorias, la calabaza, la papaya, los melocotones o el caqui.

Vitaminas imprescindibles para una dentadura perfecta

Las vitaminas más importantes para que nuestros dientes estén bonitos y sanos son:

El calcio y la vitamina D, necesarios para la formación de dientes fuertes durante el proceso de calcificación dental. El calcio es super importante para mantener tus dientes.

El flúor evita las caries al endurecer el esmalte de los dientes, reducir la capacidad de la bacteria para producir ácido y fomentar la formación mineral.

La vitamina C mantiene fuerte el tejido de las encías y es el mejor remedio para evitar un trastorno bucal tan frecuente como la gingivitis.

La vitamina K controla la pérdida de sangre, buena para la salud de las encías.

Adelgazar gracias al pepino

El pepino sirve para perder peso y adelgazar, es depurativo y laxante. Y es que el pepino es un vegetal con mucha agua y mucha fibra. Estos nutrientes eliminan la sensación de hambre y depuran el organismo.

Lo recomendable es ingerirlo con la piel, ya que como todas las frutas y verduras, la mayor cantidad de fibra se encuentra allí.

Además de para adelgazar, el pepino es anticancerígeno y contiene gran cantidad de antioxidantes. Así que: ¡refréscate este verano cosumiendo pepinos¡

¿Pueden las embarazadas blanquearse los dientes?

Las embarazadas o mujeres en periodo de lactancia no deben blanquearse los dientes por precaución, aunque no existen estudios concluyentes al respecto. El peróxido utilizado en los blanqueamientos causa un proceso de oxidación que puede ser dañino para los tejidos y las células. No se sabe si podrá ser un riesgo para el bebé.