Antes se utilizaban métodos muy agresivos y que dejaban feas cicatrices a la hora de borrar un tatuaje, los tiempos han cambiado y ahora el tratamiento con láser para borrar tatuajes es muy conveniente, indoloro y no deja marcas en la piel.
Si necesitas borrar un tatuaje debes dirigirte a las clínicas de cirugía estética, donde con la utilización médica del láser podrán sacar tatuajes, manchas o micropigmentaciones.
Este procedimiento con láser elimina la tinta de los tatuajes con la menor lesión residual posible, ya que disuelve las partículas de color para que puedan ser descartadas. Tanto los resultados como la técnica empleada variarán dependiendo del tipo de tatuaje, los pigmentos empleados, si fue realizado por un profesional o no, y lógicamente depende también de cada tipo de piel a tratar.
Suele necesitarse unas 4 sesiones para quitar tatuajes, espaciadas por un mes cada una.
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