Si tu propósito es bajar de peso, un truco fácil es cambiar el arroz blanco por el integral.
Y es que el arroz integral contiene mucha más fibra que el arroz blanco. Sus mayores beneficios se encuentran en la cáscara (el arroz blanco no contiene cáscara).
Además de la fibra, el arroz integral aporta hidratos de carbono, agua, proteínas, sodio, potasio, vitamina b12 , fósforo, aceites vegetales, calcio, hierro, provitamina A, niacina, vitamina B1, conteniendo un valor energético de 350 calorías por 100 gramos.
Es muy recomendable en dietas para adelgazar, ya que está comprobado que consumir el arroz de forma integral atenúa la sensación de hambre por más tiempo, a diferencia del arroz blanco.
Por último, el arroz integral ayuda a la eliminación de líquidos del organismo haciendo que los riñones tengan un buen funcionamiento.