Las antiguas píldoras contenían muy altas dosis de hormonas y su efecto sobre el peso era mayor. Hoy en día esa posibilidad es más remota porque las de nueva generación contienen bajas dosis de hormonas.
Sin embargo, hay algunas usuarias que pueden retener líquido o experimentar ansiedad por comer, pero estos efectos se pasan con el tiempo. Controlando la dieta y aumentando el ejercicio tendrá la báscula bajo control, tanto si toma la píldora anticonceptiva como si no lo hace.