En este masaje se trabajan las zonas con mayor cantidad de grasa del cuerpo, provocando calor con especiales movimientos que ayudan a disolver el tejido adiposo.
Los movimientos y técnicas del masaje reductivo ayudan al intensificar la circulación y el metabolismo local, a reabsorber las grasas e incrementar el consumo de calorías debido al aumento de la actividad motora.
Con un masaje reductivo se pueden reducir hasta 10 cm en 5 sesiones. La sesión tiene una duración de 2 a 3 horas.