La termosudación

La termosudación es un innovador tratamiento con el cual conseguimos una importante reducción de líquidos y una mejora de la celulitis localizada. Se trata de una técnica agradable, sencilla, indolora y totalmente inocua, que se realiza en relajantes sesiones de unos 30 minutos de duración, siendo aconsejable que se realicen una o dos sesiones por semana.
Es aconsejable beber abundante agua antes de comenzar el tratamiento para hidratar el organismo y favorecer la eliminación de toxinas. A continuación, se tumba en una camilla y la técnico le realizará un suave masaje corporal con cremas especiales lipolíticas y reductoras, formuladas para ser muy efectivas bajo el efecto de la temperatura. Después, le cubrirá el cuerpo en su totalidad con un film osmótico, además de tapar sus pies con toallas evitando así la fuga de calor, para envolverle después con la manta térmica, que actuará durante alrededor de 30 minutos.
Lo ideal es que durante ese tiempo el paciente esté relajado para favorecer la sudoración. Pasada media hora, se retira la manta térmica y el plástico que recubre su cuerpo y se le seca la piel con una toalla.

La depilación facial con láser

La depilación láser facial, también conocida como depilación definitiva del rostro, es muy alternativa para los problemas de vello facial.
El tratamiento del vello facial con métodos tradicionales de depilación como la cera o la chuchilla de afeitar suele resultar bastante complicado y doloroso. En zonas como el rostro en las que la piel es mucho más delicada se ha de prestar especial atención y cuidado para no dañar la piel al depilarse.
La depilación láser facial en esta zona es algo más difícil que en otras zonas del cuerpo y en algunos casos hay que realizar más sesiones de repaso para conseguir un resultado definitivo. Las zonas en las que se obtienen mejores resultados son el bigote y los lados del rostro.

La depilación láser para la espalda de los hombres

Los varones con pelo en la espalda y el tórax suelen empezar a producir pelo alrededor de la edad de 20 años y continúan haciéndolo hasta los 50. Los hombres que se depilen estas zonas deben saber que pueden necesitar una sesión de repaso cada varios años para que la zona vuelva a estar totalmente depilada.
Además, los hombres suelen tener la dermis más gruesa y el pelo más profundo e incluso, en ocasiones, más de una matriz dérmica por cada folículo. Estas características hacen que sean más difíciles de depilar y que los láseres que dan mejor resultado en depilación masculina sean aquellos láseres de longitud de onda más larga (penetran más), duración de pulso más largo (más eficaces para pelo más grueso), y con tamaño del impacto mayor (hace la luz más penetrante).
Hay que tener en cuenta que el hombre tiene una densidad de pelo mayor, por lo que hay más folículos que destruir y esto puede llevar a necesitar un mayor número de sesiones.

¿Son válidos los láseres depilatorios de uso doméstico?

Existen muchos hoy en el mercado. Desde luego, no sustituyen a los sistemas tradicionales, en cuanto a eficacia y seguridad: depilan mucho menos, a menudo no están exentos de riesgos y éstos son los mismos que en un láser médico. Al carecer de un sistema de refrigeración, resulta más doloroso. Por último, no hay estudios suficientes que los avalen.