Tener un cuerpo diez está al alcance de todos, y lo mejor de todo, no hay que sufrir con dietas estrictas. El secreto: cambia de hábitos, lleva una rutina de vida saludable:
1. Haz ejercicios aeróbicos con regularidad, de tres a cinco veces por semana. Esto te ayudará a eliminar la grasa acumulada.
2. Bebe gran cantidad de agua, de esta forma, mejorarás el drenaje y depurarás el organismo. Se recomienda de 1,5 a 2 litros al día. Nada más levantarte, bebe dos vasos de agua.
3. Olvida las bebidas alcohólicas o con gas, ya que aportan gran cantidad de calorías.
4. Reduce el consumo de sal, así evitarás la retención de líquidos.
5. Haz 5 comidas diarias y no te saltes ninguna, de lo contrario incrementarás la grasa de reserva en tu organismo.
6. Toma fruta antes de las comidas. Si lo haces así, facilitas la asimilación de sus vitaminas y fibras. Si las tomas después de comer, dificultan la digestión y asimilación de las grasas.
7. Realiza un desayuno completo y equilibrado. Las calorías aportadas a primera hora del día se metabolizan con mayor rapidez.
8. Evita el azúcar y las harinas refinadas, ya que se almacenan en el organismo en forma de grasa.
9. Evita las dietas de poca duración, porque a la larga terminarás ganando lo perdido, e incluso más.
10. Acostúmbrate a meter barriga a todas horas. No hay mejor entrenamiento abdominal que una buena postura erguida al andar y al estar sentado y especialmente al hacer ejercicio.
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